viernes, 16 de abril de 2010

de Wallace STEVENS: Del mero ser

La palmera al final de la mente,
pasado el último pensamiento, se eleva
en la decoración de bronce,

un pájaro de dorado plumaje
en la palmera canta, sin significado humano,
sin sentimiento humano, un extranjero son.

Sabes entonces que él no es la razón
que nos hace felices o infelices.
Canta el pájaro. Sus plumas brillan.

La palmera se alza al borde del espacio.
El viento pasa lento por las ramas.
El plumaje del pájaro, forjado a fuego, queda colgando.



Poemas Tardíos Traducción Daniel Aguirre.
Edt,Lumen. Barcelona, 2010